El Principio de Inocencia es uno de los pilares fundamentales del derecho penal y del proceso penal, protegida por normas federales como en clausulas contenidas en los Tratados internacionales de Derechos Humanos que detentan máxima jerarquía por ser parte de nuestra Constitución Nacional (art. 75° inc. 22 en función art. 31° C.N.). Este principio establece que toda persona acusada de un delito se presume inocente hasta que se demuestre lo contrario mediante una sentencia judicial firme.
Principio de Inocencia:
Definición: Es el derecho que tiene toda persona a ser tratada como inocente mientras no se pruebe su culpabilidad en un proceso penal por intermedio de una sentencia dictada de manera regular y que no sea susceptible de apelación (firme).
Carga de la prueba: La responsabilidad de demostrar la culpabilidad del acusado recae en la fiscalía o en quien lo acusa, no en la persona acusada. Esta última no tiene la obligación de probar su inocencia.
Normativa internacional: Está consagrado en documentos como la Declaración Universal de los Derechos Humanos (art. 11.1) , el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (art. 14.2) y la Convención Americana de Derechos Humanos (art. 8° num 1°).
Implicaciones prácticas: Ninguna medida de coacción, como la prisión preventiva, puede ser aplicada arbitrariamente, y siempre debe respetarse la presunción de inocencia durante todo el proceso.
Libertad durante el proceso penal:
El derecho a la libertad personal es otro principio esencial que debe ser equilibrado con las necesidades del sistema de justicia penal para investigar y perseguir delitos. Durante el proceso penal, este derecho a la libertad puede verse restringido en ciertas circunstancias, pero siempre bajo parámetros específicos.
Prisión preventiva: La prisión preventiva es una medida cautelar que puede imponerse durante un proceso penal, pero no debe ser la regla general, sino la excepción. Según el derecho internacional de los derechos humanos, la prisión preventiva debe ser utilizada únicamente cuando sea estrictamente
necesaria, y deben explorarse otras medidas menos restrictivas, como el arresto domiciliario, la imposición de fianzas, la supervisión electrónica, entre otras.
Requisitos para imponer prisión preventiva:
- Peligro de fuga.
- Peligro de obstaculización de la investigación.
- Peligro para la comunidad.
Proporcionalidad: Cualquier medida que restrinja la libertad debe ser proporcional al delito imputado y a las circunstancias personales del acusado. No puede utilizarse la prisión preventiva como una forma anticipada de pena, ya que esto violaría directamente el principio de inocencia.
Derecho a la revisión judicial: Las decisiones que afectan la libertad del acusado durante el proceso deben estar sujetas a revisión judicial constante, de modo que el tribunal valore continuamente si la medida
restrictiva sigue siendo necesaria o si pueden aplicarse alternativas.
Relación entre el Principio de Inocencia y la libertad:
Equilibrio entre seguridad y derechos: El sistema penal debe buscar un equilibrio entre proteger los derechos del acusado y garantizar la seguridad pública. El principio de inocencia implica que, salvo casos excepcionales, la libertad del individuo debe prevalecer durante el proceso penal. Solo en casos donde exista un riesgo comprobado de fuga, destrucción de pruebas o peligro para la sociedad, la restricción de la libertad puede ser justificada.
Abuso de la prisión preventiva: En muchos países, la prisión preventiva ha sido objeto de abuso, utilizándose de manera excesiva y prolongada, sin la debida fundamentación y sin ser revisa con el transcurso del tiempo, lo que puede generar violaciones al principio de inocencia y una afectación
desproporcionada del derecho a la libertad. Además, es el origen de muchos de los procesos iniciados en contra de los Estados Partes (Rpca. ArgentinaRpca. Del Paraguay entro otros) ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos por su responsabilidad internacional por desconocer las garantías contenidas en el Tratado.
Garantías procesales:
El acusado, mientras se encuentre bajo investigación o sometido a juicio, tiene una serie de derechos que deben ser garantizados para evitar que su presunción de inocencia y su libertad sean vulneradas arbitrariamente:
- Derecho a una defensa adecuada.
- Derecho a un juicio justo y público.
- Derecho a ser informado de los cargos de manera clara y detallada.
- Derecho a no ser obligado a declarar contra sí mismo.
- Derecho a la revisión de medidas cautelares.
Conclusión:
El Principio de Inocencia y el derecho a la libertad durante el proceso penal son derechos fundamentales que buscan asegurar que el proceso penal sea justo, equilibrado y respetuoso con los derechos humanos. Cualquier restricción a la libertad debe estar sólidamente justificada, ser proporcional y estar sujeta a revisión constante, siempre en el marco del respeto a la presunción de inocencia.
